CIUDAD DE WASHINGTON, 3 de marzo de 2016.
Se prevé que en 2020 las ventas de productos solares sin conexión a la red en los mercados emergentes lleguen a ser de un valor de USD 3100 millones, y que brinden acceso a energía mejorada a 99 millones de hogares que no tienen acceso a la red, de acuerdo con un nuevo informe publicado hoy por el Banco Mundial y Bloomberg New Energy Finance (BNEF), en colaboración con Global Off-Grid Lighting Association (GOGLA).
En el informe, titulado
Off-Grid Solar Market Trends
(Tendencias del mercado de energía solar sin conexión a la red), se siguen los avances tecnológicos de vanguardia y los modelos de negocios innovadores que han surgido y transformado la vida de millones de personas gracias al suministro de servicios asequibles y modernos de energía solar. En él se indica que la industria de la energía solar sin conexión a la red está en auge, y que una creciente ola de asociados en la tarea del desarrollo y de inversionistas está comprometiendo un volumen importante de fondos, centrando especialmente la atención en los modelos de negocios de pago en cuotas. Se llega a la conclusión de que las inversiones anuales en la industria han sido de USD 276 millones en 2015, monto que representa un aumento de quince veces desde 2012. También se señala que 89 millones de personas en África y Asia ya tienen acceso mejorado a la energía gracias al uso de productos solares sin conexión a la red.
“En el informe se presenta información completa del estado de una de las industrias de mayor impacto en la economía mundial en la actualidad”, expresó Russell Sturm, encargado de la División de Acceso a la Energía de IFC a nivel mundial y el programa “Iluminación para el Mundo” del Grupo Banco Mundial. “Se trata del tercer informe de una serie producida por el Programa 'Iluminación para el Mundo' del Grupo Banco Mundial desde el surgimiento de la industria hace siete años; en él se ilustra cómo la energía solar sin conexión a la red puede ser un factor de cambio para el desarrollo, así como una oportunidad única de negocios para el sector privado en el ámbito del acceso a la energía”.
Las lámparas portátiles que funcionan con energía solar y los equipos de sistemas solares domésticos brindan un servicio más seguro, más económico y más inocuo para el medio ambiente a 1200 millones de personas que no tienen acceso a la red de energía eléctrica y que actualmente gastan alrededor de USD 27 millones al año en fuentes de iluminación que utilizan combustible, y tecnologías de carga de teléfonos móviles.
“El modelo de negocios de pago en cuotas combina la innovación rápida en lámparas solares, lámparas de batería y lámparas LED con el poder transformador de la tecnología de las comunicaciones”, afirmó Itamar Orlandi, jefe de investigaciones aplicadas de BNEF. “Esto permite a las nuevas empresas generar servicios y ventas y lograr una profunda comprensión de sus clientes a un ritmo acelerado, lo que a su vez está permitiendo atraer nuevas fuentes de capital para el crecimiento de la industria”.
Koen Peters, director ejecutivo de GOGLA, agregó: “Este informe revela el éxito de la cooperación entre GOGLA, 'Iluminación para el Mundo' y BNEF para obtener información valiosa sobre el mercado. Los datos e ideas que aporta este informe son cruciales para proporcionar información a los responsables de la formulación de las políticas, a los inversionistas y a otros interesados con el fin de contribuir al desarrollo y el fortalecimiento de nuestra industria, y de brindar información esencial a las empresas de energía solar”.
“El logro del objetivo de acceso universal no dependerá de la ampliación de la red exclusivamente, de modo que las tecnologías sin conexión a la red son cruciales para la consecución de nuestro objetivo. Esta es la razón por la que el Grupo Banco Mundial, a través de su plataforma 'Iluminación para el Mundo', respalda el crecimiento de un mercado de energía solar sin conexión a la red como medio para aumentar el acceso a la energía de las personas para quienes la red de energía eléctrica no se presenta como una opción viable”, expresó Charles Feinstein, director de Prácticas Mundiales de Energía e Industrias Extractivas, del Banco Mundial.